- 500 g de patatas, peladas, lavadas y cortadas en rodajas finas
- 1 cebolleta (solo la parte blanca), picada
- 100 g de calabacín, rallado o picado
- Nohuevo:
· 80 g de harina de garbanzo
· 100 ml de agua
· 1/2 cucharada de vinagre de manzana
· Sal al gusto, normal o kala namak para darle sabor a huevo
· OPCIONAL: pizca de cúrcuma, para darle color
- AOVE (Aceite de Oliva Virgen Extra)
PROCEDIMIENTO
- Lo más importante a la hora de hacer una tortilla vegana es contar con una sartén antiadherente, eso lo primero de todo.
- Calentar un chorro generoso de AOVE en una sartén a fuego medio-alto.
- Una vez que esté el aceite bien caliente, echar las patatas, la cebolleta y el calabacín a la sartén, remover para mezclar, tapar y bajar a fuego medio.
- Las patatas no deben freírse, sino que deben quedar blanditas (no importa si alguna se dora).
- Yo lo que hago es ponerme un cronómetro y cada 10 minutos destapo para comprobar cómo van, y también las remuevo un poco.
- Para hacer el nohuevo, simplemente mezclar muy bien los ingredientes, yo lo hago con unas varillas de metal.
- Cuando las patatas estén listas, las mezclamos con el nohuevo. Puede parecer poca cantidad, pero creédme que es más que suficiente. Mezclad bien todo y veréis que es mejor que no quede demasiado líquida. Este es un fallo que he estado cometiendo mucho: con la cosa que querer darle textura de huevo, al final aguaba el nohuevo, y luego no quedaba tan bien.
- Bajar el fuego a fuego medio-bajo (en mi vitro lo pongo al 5 de 12), echar la mezcla de patatas y nohuevo a la sartén y ajustarla al tamaño de la sartén con algún utensilio de cocina. No es necesario añadir aceite a la sartén, con el aceite residual de cocinar las patatas es suficiente.
- Dejar que se cocine por un lado 5 minutos, darle la vuelta con cuidado y cocinarla por el otro 5 minutos más, o hasta que empiece a dorarse.
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